Fibrilación auricular: signos, complicaciones y tratamientos

La fibrilación auricular (FA) es el trastorno del ritmo cardíaco más común que encuentran los médicos. Esta enfermedad puede afectar a adultos de cualquier edad, pero es más común en personas que envejecen.

Sobre esta enfermedad, BeHealth realizó una entrevista con el doctor Francisco Pérez, electrofisiólogo del Centro Médico Episcopal San Lucas. Al respecto nos contó que se trata de un “problema del ritmo cardíaco; el corazón usualmente tiene un ritmo regular donde la actividad eléctrica comienza en la parte superior y continúa hacia abajo, esos son los latidos”.

“La fibrilación auricular es la arritmia cardíaca más común que existe. A los 80 años casi el 15 o el 20% de la población podría tener fibrilación auricular. Además, de cada 10 personas, dos podrían tener fibrilación auricular”, plantea el doctor Francisco Pérez.

Se trata entonces de una condición con alta prevalencia cuyo principal factor de riesgo es la hipertensión o la alta presión no controlada.

Según explica el galeno, recientemente se han determinado otros factores de riesgo muy similares, resalta aquí la apnea del sueño y la obesidad.

Según indica el galeno, cuando -en la parte superior del corazón- se presenta una actividad caótica, esto se conoce como fibrilación atrial.

“Cuando se pierde la organización rítmica del corazón en la parte conocida como el atrio o aurícula. Cuando el paciente lo padece, la aurícula no se contrae adecuadamente”, agregó el doctor Pérez.

Esto trae como consecuencia que la sangre pueda formar coágulos que podrían viajar al cerebro y causar un derrame cerebral o un accidente cerebrovascular.

Por otro lado, resalta el especialista, al tratarse de una actividad tan rápida, esta podría causar el pulso rápido o irregular conocido como taquicardia.

Síntomas principales de la fibrilación auricular

“El paciente puede tener palpitaciones, dolor de pecho, mareo y hasta desmayos”, señala.

 En este sentido, el paciente siente que su corazón late bien rápido. Adicionalmente, en casos de mayor severidad, puede presentar dolor de pecho, mareos y desmayo. Esto, debido a que “la actividad eléctrica del corazón va rápido”.

La mayoría de los pacientes sienten irregularidad, pero, desafortunadamente, otros pueden presentan un evento sin haber percibido signos.

Riesgos de la fibrilación auricular

Los pacientes con fibrilación auricular tienen cinco más veces riesgo de padecer enfermedades cerebrovasculares, según comenta el galeno a BeHealth. Por ello, es más frecuente la hospitalización de personas con fibrilación auricular que con todas las demás arritmias.

Diagnóstico

“Cuando llega el paciente, el médico le realiza un examen físico que incluye palpar pulsos y auscultación con el estetoscopio”, refiere el entrevistado.

Adicional a ello, también se realiza un electrocardiograma, el examen clave en el diagnóstico.

“Al paciente se le adhieren al pecho y los brazos unos parches llamados electrodos. En menos de 5 minutos se puede hacer el diagnóstico y es 100% certero”, explicó.

Tratamientos de la fibrilación auricular

El tratamiento se basa en dos aspectos principales. El primero es identificar el riesgo que el paciente tiene de formar un coágulo. En ese caso, según declara el electrofisiólogo, hay que tratarlo con anticoagulación.

“En cuanto al ritmo cardíaco, tenemos diversos medicamentos o procedimientos invasivos como las ablaciones para corregir el problema”.

“Si el paciente tenga insuficiencia cardíaca, hipertensión, alguna enfermedad vascular, es mayor de 65 años o si tiene o ha tenido algún evento cerebrovascular previo, podemos en la actualidad controlar al paciente con los nuevos anticoagulantes recientemente aprobados”, resalta el doctor; ya que anteriormente se usaba la Warfarina.

Por otro lado, para el ritmo cardíaco y la frecuencia cardíaca se usan betabloqueadores y medicamentos antiarrítmicos respectivamente.

Finalmente, se podría usar la ablación cardíaca. Este es un procedimiento que se utiliza para crear cicatrices en pequeñas zonas del corazón para evitar que las señales o los ritmos eléctricos anormales se muevan a través del corazón.

Importancia del diagnóstico temprano

Según sostiene el especialista, es vital identificar a tiempo el problema. “Los médicos decimos que fibrilación atrial trae fibrilación atrial. Es importante que seamos agresivos de forma temprana”.

Una fibrilación que no controlemos se va a perpetuar y permitir que se agrande la aurícula, que haya cambios al nivel de tejido, fibrosis y cambios eléctricos. “Si lo dejamos fibrilar, va a fibrilar más y no podremos curar”, resaltó.

Finalmente, el galeno asevera que no se trata de una enfermedad benigna pues aumenta en gran medida el riesgo de morbilidad y mortalidad en enfermedades cardiovasculares:

“Muchas veces el riesgo de eventos cerebrovasculares es muy alto y la aspirina no es anticoagulante. Un evento así no causa la muerte, pero es devastador porque terminan encamados e incapacitados, afecta a la vida”.

Lo mejor, tal como atestigua el doctor Pérez, es llevar un estilo de vida saludable, hacer ejercicio físico, cuidar la alimentación, limitar el alcohol y eliminar el cigarrillo.