¿Cómo manejar la disfunción urinaria y sexual en la esclerosis múltiple?

Un artículo publicado por la Dra. Nerea García Alvarado, especialista en neurología, en el portal ConLaEM describe a la “esclerosis múltiple (EM) como la enfermedad autoinmune más frecuente del sistema nervioso central y por ello es una de las principales causas de disfunción urinaria y sexual”

La Dra. García explicó la importancia de detectar y tratar tempranamente los síntomas de este tipo de disfunciones ya que quienes lo presentan pueden ver afectada en gran medida su calidad de vida.

Este tipo de cambios no solo son difíciles de enfrentar sino que pueden además ocasionar otros problemas para la salud como infecciones de orina de repetición o alteración de la función renal y a nivel emocional puede generar depresión o ansiedad.

¿Cuándo se presentan los síntomas?

Los síntomas urinarios suelen presentarse en la mayoría de los casos a  los ocho años y medio desde el inicio de la enfermedad, sin embargo, de acuerdo con la neuróloga, uno de cada diez pacientes puede  presentar los síntomas cuando recibe el diagnóstico.

Algunos de los signos de disfunción urinaria son:

• Urgencia miccional.
• Incontinencia.
• Aumento de la frecuencia miccional tanto diurna como nocturna.
• Sensación de vaciado incompleto.
• Tenesmo vesical y retención urinaria.

Para el caso de las personas con esclerosis que presentan disfunción sexual, según los estudios se presenta en entre un 40-80% de las mujeres y un 50-90% de los hombres con EM. 

¿Por qué se presentan?

El sistema nervioso autónomo se divide en sistema nervioso simpático y  parasimpático y es el encargado de la inervación de los órganos que intervienen en la  micción y en las funciones intestinales y sexuales. 

Cuando por causa de la desmielinización se presentan lesiones en el cerebro y la médula espinal se puede generar una dificultad para el almacenamiento de la orina, favoreciendo la hiperactividad del músculo detrusor de la vejiga.

En el ámbito sexual, las lesiones pueden generar dificultades en la erección y en la eyaculación en hombres, y una incorrecta lubricación vaginal o dolor durante la actividad sexual en las mujeres. 

Además, otros signos característicos de la esclerosis múltiple también pueden interferir negativamente en los encuentros sexuales, tales como:

• Espasticidad.
• Dolor neuropático.
• Fatiga.
• Problemas de depresión.

¿Cómo tratarlas?

Cuando un paciente recibe un diagnóstico de esclerosis múltiple es importante que se trate tempranamente por un equipo de profesionales que involucre neurólogos, urólogos, psicólogos y rehabilitadores. 

La especialista aseguró al portal citado, que el “entrenamiento del suelo pélvico, la educación sexual, la psicoterapia y los fármacos que favorecen la relajación de la  vejiga, la contracción/relajación de los esfínteres o el mantenimiento de la erección  suelen ser el primer escalón terapéutico”.

Existen estrategias terapéuticas para tratar estas alteraciones, sin embargo, en algunos casos pueden ocasionar consecuencias negativas para la salud física o no funcionar correctamente. En este caso, los pacientes pueden optar por una inyección intravesical de toxina botulínica, neuroestimulación o algunas técnicas quirúrgicas, siempre y cuando estas sean aprobadas por el médico tratante.

Identificar y dar seguimiento al tratamiento de estos síntomas, ofrece a los pacientes la posibilidad de tener una mejor calidad de vida y de no presentar mayores limitaciones de las que ya trae la enfermedad así como a disminuir el riesgo de complicaciones a largo plazo. 

Los tratamientos para los pacientes con esclerosis múltiple deben realizarse de forma individualizada, teniendo en cuenta sus expectativas, los síntomas que lo afectan en particular y sus estado de salud en general.

Fuente. Con La EM.