Cateterismo cardíaco: más allá de un simple examen diagnóstico
BeHealth continúa con su edición digital e impresa de ‘Cuida Tus Latidos’ y esta vez trae para ti todo lo concerniente al cateterismo cardíaco, un procedimiento invasivo que destapa arterias, diagnostica algunas condiciones cardíacas y trae consigo otros múltiples beneficios que explicó el Dr. Gilberto Rivera, cardiólogo, en diálogo con nuestro equipo multimedios.
De acuerdo con el galeno, el catéter utilizado para este procedimiento casi siempre se introduce desde la ingle o el brazo, contrario a lo que muchos pacientes creían que se metía por el pecho o en cercanías al corazón.
“El cateterismo es un estudio invasivo que requiere una preparación y una evaluación por un especialista que realiza estos procedimientos y usualmente conlleva una evaluación previa junto con otros estudios que brindan información y que sugieren si existe alta probabilidad de que la persona tenga enfermedad en las arterias del corazón o que tiene otras condiciones que ameritan este tipo de estudios”, explicó el expresidente de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología.
¿Cómo se realiza el procedimiento?
De acuerdo con el Dr. Rivera, tu médico o personal salubrista te limpiará el brazo, el cuello o la ingle e introducirá una vía intravenosa (IV) en una de las venas y ahí comienza con la realización del cateterismo.
“Te introducen dentro del cuerpo un catéter, que es como un cable, por el cual se puede administrar un contraste, que es un líquido especializado llevado a las arterias del corazón, que se llaman las coronarias. Una vez está ubicado en estas arterias se inyecta ese contraste mientras se va grabando la imagen de las arterias del corazón”, ahondó el especialista.
Dice el doctor Gilberto, en este estudio se puede ver el estado arterial, tomar las medidas del corazón y saber cómo están funcionando algunos de los componentes del sistema cardíaco. “Tomamos medidas del ventrículo izquierdo, que es el principal que bombea sangre, así como también las presiones en la aorta”, agregó.
¿En qué casos es necesario un cateterismo?
Por lo general, este procedimiento se realiza para obtener información acerca del corazón y sus vasos sanguíneos, así como para identificar otras afecciones cardíacas, e incluso, para determinar si necesitas una cirugía del corazón.
“Usualmente son personas que que ya tienen unos síntomas subjetivos de que hay un problema en el corazón y suelten tener síntomas como: dolor de pecho, que están presentando dificultad respiratoria al esfuerzo y que tienen una disminución en su capacidad de realizar actividad física”, dijo.
Además, destacó que, mediante ese procedimiento, se pueden evidenciar problemas en “algunas de esas válvulas del corazón, para hacer reemplazo o reparación de una válvula y completar toda la información que es necesaria previa a la toma de decisión de una cirugía o intervención de válvula”, anotó.
¿Se requiere anestesia?
Ten en cuenta que para un cateterismo no debes comer ni beber nada durante 6 a 8 horas antes del examen, el cual se lleva a cabo en el hospital. Además, según el cardiólogo, puede que necesites de “anestesia local y sedación consciente”.
“El cateterismo cardíaco es el estudio definitivo para hacer la evaluación de las arterias del corazón y evaluar lo que nosotros llamamos el estado hemodinámico, que son las presiones del corazón en un paciente que presenta síntomas sugestivos”, subrayó.
Además, enfatizó en que con la realización de esta prueba diagnostica no se utilizan otros exámenes complementarios como “prueba de esfuerzo o un estudio de medicina nuclear previo”.
“El cateterismo también se puede realizar de forma de emergencia en los pacientes que tienen un subgrupo de infarto que se llama infarto con elevación del segmento ST. Esos son pacientes que por definición han tenido una oclusión completa de una arteria y están activamente infartados y se les debe realizar un cateterismo para hacer un angioplastia de emergencia, una angioplastia primaria y abrir la arteria de estado fluido. Eso se debe tratar de realizar en un periodo menor a 90 minutos, que es hora y media desde que el paciente llega al centro de cuidado para buscar ayuda ante un episodio de dolor de pecho”, explicó el Dr. Rivera en diálogo con BeHealth.