Vivir con una enfermedad crónica, como es el caso del lupus, puede parecer abrumador, al menos al principio. Sin embargo, existen opciones para controlar sus efectos; acompáñanos a descubrirlos con estos tres consejos:
1. Disfruta sabiamente del sol
- Evita el sol de mediodía y el sol tropical
- Prescinde de las actividades al aire libre durante las horas de mayor luz solar (generalmente de 10 de la mañana a 4 de la tarde).
- Utiliza protectores, filtros o pantallas solares con regularidad (aun cuando esté nublado).
2. Pon atención a la nutrición
Consume una dieta balanceada. Según la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) de los Estados Unidos, ésta se basa en alimentos de origen vegetal. Aproximadamente dos tercios de la dieta debe provenir de frutas, verduras y cereales integrales. El resto incluye productos sin o con poca grasa y fuentes de proteína magra.
3. Descansa y realiza actividad física
- El descanso es importante cuando el lupus está activo y las articulaciones duelen, están rígidas o inflamadas. Este ayuda a disminuir la fatiga y la inflamación durante los episodios agudos.
- Practica ejercicios con regularidad. Tu programa de ejercicio debe destacar movimientos aeróbicos de bajo impacto, fortalecimiento de los músculos y flexibilidad. Debe tomar en cuenta su condición física y capacidades, además del estado de sus articulaciones.
4. Toma los medicamentos
- Sigue el plan de tratamiento recetado por tu médico y toma los medicamentos según las indicaciones.
- No omitas dosis y comunica cualquier efecto secundario a tu equipo médico.
5. Manejo del estrés
- Encuentra técnicas de relajación que te ayuden a reducir el estrés, como la meditación, yoga o ejercicios de respiración.
- Busca actividades que te brinden calma y bienestar.
