Una profesora falleció en California por mordedura de murciélago

Una profesora de 60 años llamada Leah Seneng y quién vivía en California, Estados Unidos, falleció tras ser mordida por un murciélago en su salón de clases, convirtiéndose en la primera víctima humana de rabia en el condado de Fresno en más de 30 años. Este suceso fue confirmado por las autoridades sanitarias locales, que explicaron que la docente, quien trabajaba en una escuela secundaria, sufrió la mordedura mientras intentaba rescatar al animal.

De acuerdo con una amiga cercana de la familia, Seneng encontró al murciélago en el suelo de su aula y, pensando que estaba muerto, trató de levantarlo para llevarlo afuera, el animal reaccionó de manera repentina, mordiendo a la maestra; la rabia se desarrolló casi un mes después, lo que retrasó su búsqueda de atención médica.

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El Departamento de Salud Pública del Condado de Fresno explicó que, aunque la exposición ocurrió a mediados de octubre, Seneng no acudió a urgencias hasta finales de noviembre, cuando su condición se agravó. Fue hospitalizada el 18 de noviembre y, lamentablemente, falleció pocos días después, el 22 de noviembre. Es importante resaltar que las autoridades manifiestan que la rabia, una vez que los síntomas se manifiestan, es casi siempre fatal si no se administra tratamiento inmediato..

¿Qué dicen los expertos sobre el tema?

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han advertido en numerosas ocasiones sobre la importancia de recibir atención médica lo más pronto posible tras una posible exposición al virus de la rabia. Este tratamiento, conocido como profilaxis post exposición (PEP), incluye vacunas y otros cuidados esenciales, y puede prevenir la enfermedad si se administra a tiempo.

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Aunque la rabia es relativamente rara en los humanos de Estados Unidos, las mordeduras de murciélagos representan la mayor parte de los casos mortales. De hecho, según los CDC, más del 70% de las muertes humanas por rabia en Estados Unidos están vinculadas a murciélagos. La enfermedad, que afecta al sistema nervioso central y puede llevar a la muerte si no se trata, se transmite principalmente a través de la saliva de animales infectados, como murciélagos, mapaches, zorrillos y zorros.