El avance histórico logró que cinco niños sordos de nacimiento recuperaran la audición gracias a la innovadora terapia génica.
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Este logro, lo llevó acabo un equipo de investigadores de la Universidad de Fudan en Shanghái, lo que representa un avance en la lucha contra la sordera congénita y crea esperanzas en miles de personas que padecen de esta condición.
Los niños entre las edades de uno a once años, padecían de una extraña sordera a causa de mutaciones genéticas, que los llevaron a ser inyectados por un virus modificado genéticamente el cual transporta genes saludables a células que se relacionan con la audición.
¿Cómo funciona la terapia?
La terapia genera un virus inactivo que se introduce dentro del oído con el propósito de generar copias funcionales del gen afectado, OTOF (gen), en el oído interno. Luego de que esté dentro, las células del oído el material genético para producir copias funcionales de la proteína otorfelina.
Los resultados de este tratamiento, los pacientes los pudieron notar luego de 13 semanas, tras recibir varias inyecciones. Cada paciente es diferente, pero esta terapia sí ha tenido un efecto positivo en la vida de estas personas.
Al recibir este tratamiento, los niños experimentaron una mejora significativa en su capacidad auditiva. Algunos de ellos escucharon conversaciones y sonidos ambientales por primera vez. Aunque con precaución, los profesionales de la salud están entusiasmados con los resultados y esperan que esta terapia pueda seguir siendo efectiva para ser utilizada en tratamientos de personas con sordera congénita en el futuro.
Investigaciones futuras
Según la Organización Mundial de la Salud, alrededor del 5% de la población mundial, o 430 millones de personas, sufren pérdida auditiva incapacitante, incluyendo 34 millones de niños. De las 26 millones de personas con pérdida auditiva congénita, el 60% se atribuye a factores genéticos.
“Estos resultados confirman la eficacia del tratamiento sobre el que habíamos informado anteriormente y representan un paso importante en la terapia génica para la pérdida de audición genética”, mencionó Yilai Shu, autor principal del estudio.
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