Tengo dermatitis atópica: ¿cómo puedo hidratar mi piel?
Uno de los ‘dolores de cabeza’ más frecuentes de los pacientes con dermatitis atópica es alcanzar una hidratación adecuada para que el picor y dolor que causa la enfermedad no los atormente. A continuación, te contaremos algunos tips que te servirán.
De acuerdo con expertos, lo primero que debes tener en cuenta es que tu piel es completamente diferente a la de pacientes que no tienen la condición, por lo que debes cambiar casi que por completo los hábitos de vida.
Por ejemplo, no se recomienda que tomes duchas tan extensas. Además, si vas a cambiar de clima, intenta que no sean cambios bruscos de temperatura debido a que eso puede incidir en el estado de la enfermedad.
Si tu dermatólogo te prescribe jabones, cremas o geles intenta usarlos con juicio. Ten en cuenta que si no sigues los tratamientos que te manda tu médico tratante el que se verá perjudicado, ya sea a largo o corto tiempo, eres tu mismo.
Ten en cuenta que los productos que uses para hidratar tu piel no deben eliminar por completo el manto lipídico de nuestra piel, por lo que puedes revisar antes de comprarlos su composición, efectos secundarios, entre otros.
Cuando seques tu piel al ducharte o al querer retirar el producto que te aplicaste hazlo con suavidad y no restriegues con dureza. Recuerda que tu piel es más delicada e, incluso para algo tan sencillo como limpiarse, necesita el mayo tacto y delicadeza.
Expertos en dermatología y dermatitis atópica también recomiendan que los pacientes se apliquen cremas emolientes que no solo hidratan la dermis, sino que aportan múltiples vitaminas y nutrientes que son indispensables para pacientes con dermatitis atópica.
En esa línea, ese tipo de cremas deben tener ciertas características especiales como: que sean ricas en ácidos grasos esenciales y que incluyan productos que disminuyan el picor y que eviten la sobreinfección bacteriana.
Una buena hidratación para el cuerpo es indispensable. En esa línea, bebe al menos dos litros de agua al día, consume frutas, verduras y alimentos ricos en nutrientes y vitaminas, que no estén ultraprocesados, y que puedan ayudarte con tu condición.
Ten en cuenta que para tu tipo de piel no sirve cualquier crema. De hecho, existen algunas cremas que, aunque dicen ser hidratantes, para pieles con dermatitis atópica son bastante nocivas, al punto que podrían irritar el eccema (como se conoce a la enfermedad) y causar inflamación, rasquiña, entre otros síntomas.
Sabiendo esto, debes conocer que una vez salgas de bañarte es el mejor momento para aplicarte la crema o gel prescrito por tu dermatólogo debido a que la piel tiene los poros abiertos debido al agua, por lo que los geles y demás podrían traer mayores frutos.