Establece horarios definidos

Uno de los primeros pasos para encontrar equilibrio es establecer horarios definidos para el trabajo y para las actividades personales. Marcar el inicio y el final de la jornada laboral ayuda a crear una separación clara entre el trabajo y el tiempo libre. Esto puede implicar establecer una hora específica para comenzar y terminar el trabajo cada día, así como también definir momentos para el descanso y el ocio.

Crea un espacio propio

Es importante contar con un espacio dedicado en el hogar para realizar el trabajo. Este espacio debe estar separado de las áreas destinadas al descanso y el entretenimiento. Contar con un espacio propio ayuda a establecer límites físicos entre el trabajo y la vida personal, lo que facilita la desconexión al finalizar la jornada laboral.

Utiliza la tecnología a tu favor

Si bien la tecnología puede contribuir a la dificultad para desconectar del trabajo, también puede ser una herramienta útil para establecer límites. Utiliza aplicaciones de gestión del tiempo y recordatorios para organizar tus tareas y prioridades. Delimita el uso de dispositivos electrónicos fuera del horario laboral para evitar distracciones innecesarias.

Comunica tus necesidades en el trabajo

Es fundamental comunicar claramente tus necesidades y expectativas en el trabajo. Establece límites con tus colegas y superiores respecto a tu disponibilidad fuera del horario laboral. Deja en claro cuándo estás disponible para trabajar y cuándo necesitas tiempo para ti mismo y tus seres queridos.

Cuida de ti mismo

El autocuidado juega un papel crucial en el mantenimiento de un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida personal. Dedica tiempo regularmente para actividades que promuevan tu bienestar físico, emocional y mental. Esto puede incluir ejercicio, meditación, hobbies, tiempo al aire libre o simplemente relajarte con un buen libro o una película.

Desconecta cuando sea necesario

Aprende a desconectar del trabajo cuando finaliza tu jornada laboral. Apaga las notificaciones de correo electrónico y las alertas del trabajo en tu teléfono y otros dispositivos electrónicos. Establece límites claros entre el tiempo dedicado al trabajo y el tiempo dedicado a tus actividades personales.

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Aprende a decir no

Es importante aprender a establecer límites y decir no cuando sea necesario. Si te sientes abrumado por las responsabilidades laborales o si una solicitud de trabajo interferirá con tu tiempo personal, no dudes en expresar tus límites y prioridades. Aprender a decir no de manera respetuosa es esencial para proteger tu bienestar y mantener un equilibrio saludable.

Disfruta de momentos de calidad

Programa tiempo regularmente para actividades que te traigan alegría y satisfacción en tu vida personal. Dedica tiempo a tus hobbies, sal a caminar, cena con amigos o disfruta de una noche tranquila en casa con tu familia. Estos momentos de calidad te ayudarán a recargar energías y mantener un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida personal.

Revisa tu equilibrio regularmente

Haz un esfuerzo consciente para revisar regularmente cómo te sientes en cuanto al equilibrio entre el trabajo y la vida personal. Evalúa si estás dedicando suficiente tiempo y energía a las diferentes áreas de tu vida y ajusta tus hábitos y rutinas según sea necesario para mantener un equilibrio saludable.

Encontrar un equilibrio entre el trabajo y la vida personal puede ser un desafío en el mundo moderno, pero es fundamental para nuestro bienestar general. Al establecer límites claros, cuidar de nosotros mismos y priorizar nuestras necesidades personales, podemos cultivar un equilibrio que promueva nuestra felicidad y satisfacción en todas las áreas de la vida.

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La relación entre la salud mental y las condiciones médicas crónicas ha sido objeto de estudio durante décadas. En el caso de la esofagitis eosinofílica (EoE), una enfermedad inflamatoria crónica del esófago, la salud mental juega un papel significativo en la experiencia del paciente. Las estadísticas revelan que existe una correlación directa entre la EoE y diversos trastornos psicológicos, lo que puede complicar aún más la gestión y el tratamiento de esta afección.

Impacto psicológico de la esofagitis eosinofílica

Vivir con una enfermedad crónica como la EE puede tener un efecto significativo en la salud mental de un individuo. Los síntomas físicos, que pueden incluir dificultad para tragar, dolor torácico y reflujo ácido, pueden provocar estrés, ansiedad y depresión. Asimismo, el estrés crónico asociado con la gestión de la enfermedad, las restricciones dietéticas y el temor a los brotes pueden contribuir a problemas de salud mental.

Sin embargo, la salud mental juega un papel crucial en el manejo integral de la EE. Los pacientes pueden beneficiarse de estrategias para reducir el estrés y la ansiedad, como la terapia cognitivo-conductual (TCC), la meditación y el yoga. Estas técnicas pueden ayudar a desarrollar habilidades de afrontamiento efectivas y mejorar la calidad de vida.

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Por tanto, es fundamental que los proveedores de atención médica reconozcan y aborden tanto los aspectos físicos como los mentales de la EE. Un enfoque integral que incorpore tanto el tratamiento médico para controlar la inflamación del esófago como el apoyo psicológico para manejar el impacto emocional de la enfermedad puede mejorar los resultados y la experiencia del paciente.

¿Qué tanto impacta actualmente?

Según investigaciones recientes, aproximadamente un tercio de los adultos diagnosticados con EoE experimentan ansiedad, mientras que hasta un 15% enfrentan depresión. Estas cifras destacan la carga psicológica que puede acompañar a la enfermedad, afectando la calidad de vida y el bienestar general de los pacientes.

Además, la situación no es menos preocupante en el caso de los niños que padecen EoE. Se estima que la mitad de los niños diagnosticados con esta afección requieren intervención psicológica para hacer frente a los desafíos emocionales y psicosociales que conlleva la enfermedad. Sorprendentemente, un 25% de estos niños necesitan medicación psiquiátrica para manejar sus síntomas psicológicos.

Estas estadísticas subrayan la importancia de abordar la salud mental en el contexto de la EoE. No solo es crucial para mejorar la calidad de vida de los pacientes, sino que también puede influir en la adherencia al tratamiento y en los resultados a largo plazo. 

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Este incidente resalta la relevancia de comprender y atender las necesidades emocionales de los concursantes y, por extensión, de todas las personas que enfrentan situaciones similares de confinamiento.

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El estrés, muchas veces subestimado, puede manifestarse de diversas formas y tener un impacto significativo en la salud física y mental de una persona. A menudo, se pasa por alto al buscar explicaciones para síntomas como dolores de cabeza, dificultades para dormir, fatiga o falta de concentración en el trabajo. Sin embargo, es crucial reconocer que el estrés puede ser la causa subyacente de estos problemas. 

Según expertos de Mayo Clinic, sus efectos pueden afectar tanto el cuerpo, con síntomas físicos como dolores musculares o gastrointestinales, como la mente y las emociones, con pensamientos negativos o sentimientos de ansiedad. Además, el estrés crónico no controlado puede contribuir al desarrollo de una variedad de enfermedades graves, incluyendo hipertensión, enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, obesidad y diabetes. 

Efectos comunes del estrés

• Sobre el cuerpo:  Dolor de cabeza, tensión o dolor muscular, dolor de pecho, fatiga, cambios en el deseo sexual, malestar estomacal, problemas de sueño y más probabilidad de enfermarse
• Sobre el estado de ánimo: Ansiedad, falta de motivación, problemas de memoria, malhumor o ira, depresión y tristeza, falta de tiempo y sentirse abrumado.
• Sobre el comportamiento: Comer en exceso o no comer lo suficiente, arrebatos de ira, abuso de drogas o alcohol, quedarse en casa, menos dedicación al ejercicio, sistema inmunitario débil 

A nivel mundial

Los trastornos de ansiedad son los trastornos mentales más comunes del mundo: en los últimos 3 años afectaron a más de 301 millones de personas, según la Organización Mundial de la Salud. Además, sus síntomas suelen aparecer durante la infancia o la adolescencia.

“Existen tratamientos muy eficaces para este tipo de trastornos. Aproximadamente una de cada cuatro personas con un trastorno de ansiedad recibe tratamiento para esa afección”, comentó la OMS.

Puerto Rico

Recientes reportes del Instituto de Estadística de Puerto Rico sobre Salud Mental de la isla, indican que aproximadamente el 25% de la población de Puerto Rico experimenta algún tipo de trastorno mental a lo largo de su vida. Esto incluye trastornos de ansiedad, depresión, trastorno bipolar, entre otros.

Asimismo, que el 50% de los adultos con trastornos mentales en Puerto Rico no reciben tratamiento debido a barreras como la falta de acceso a servicios de salud mental, estigma y falta de conciencia sobre los recursos disponibles.

«Puerto Rico ha experimentado varios desastres naturales en los últimos años, como el huracán María en 2017 y una serie de terremotos en 2020. Estos eventos pueden tener un impacto significativo en la salud mental de la población, aumentando la prevalencia de trastornos como el trastorno de estrés postraumático (TEPT) y la depresión», dice la autoridad.

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Las investigaciones, por su parte, han evidenciado que quienes tienen ansiedad y depresión pueden manejar sus síntomas si realizan sesiones de meditación, que puede ser mediante el yoga o al aire libre y hasta en la playa.

Para conocer los resultados, los investigadores analizaron a 276 sujetos que tenían ansiedad. Todos ellos se sometieron a terapias en las que se les controló el estrés mediante atención plena que consistía en clase que duraban entre casi 3 horas por semana.

Casi 208 de los participantes que se sometieron a esta práctica mostraron considerables y beneficiosos resultados: según la escala de Impresión Clínica Global se evidenció que el 4,44 para la terapia de reducción del estrés basado en la atención plena y de 4,51 para escitalopram, mostraron reducción en los síntomas de ansiedad.

“En la semana 8, la puntuación del grupo asignado a terapia de reducción del estrés basado en la atención plena mejoró una media de 1,35 puntos, mientras que la puntuación del grupo que recibió escitalopram mejoró 1,43 puntos (diferencia: -0,07; intervalo de confianza de 95% [IC 95%]: -0,38 a 0,23; p = 0,65). El extremo inferior del intervalo de confianza (-0,38) fue menor que el margen de no inferioridad preespecificado de -0,495, lo que indica la no inferioridad. Alrededor de 78% de los participantes que recibieron escitalopram tuvieron al menos un efecto adverso relacionado con el medicamento, en comparación con 15,4% del grupo asignado a terapia de reducción del estrés basado en la atención plena”, detalle el texto del estudio publicado en MedsCape. 

Así mismo, el estudio evidenció que las personas que se sometieron a prácticas de yoga, que tenían diabetes y, a su vez, ansiedad, disminuyeron los niveles no solo de estrés y ansiedad, sino también de la hemoglobina glucosilada, que es uno de los marcadores de los pacientes diabéticos.

Dentro de sus beneficios, inclusive, los expertos aseguran que ayudan considerablemente con el manejo del dolor. A varios pacientes que sufrían de esta característica se les aplicó una serie de pruebas que, tras varias semanas de análisis, evidenciaron que la meditación y la implementación de terapias que redujeran el estrés, les traía disminución en el dolor que sentían en alguna parte del cuerpo.

“El grupo asignado a terapia de reducción del estrés basado en la atención plena tuvo una disminución significativa de la firma del dolor neurológico en comparación con el grupo asignado al programa de mejora de la salud (p = 0,05) y de las evaluaciones previas a la intervención (p = 0,023)”, explicaron los investigadores.

Así que no lo dudes, si tienes alguna de las antes descritas patologías, busca un programa de meditación y prácticalo, tu salud te lo agradecerá.

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Lo primero siempre será la educación: si ustedes, padres y madres, no conocen del tema, la ciencia psicológica y psiquiátrica ha recomendado que se formen y acudan a centros de capacitación que les permita entender cómo manejar a sus pequeños diagnosticados con enfermedades de la mente.

Si tu pequeño empieza a manifestar problemas para comer, dormir o estarse quieto, lo más probable es que tenga algún trastorno que requiere de atención inmediata. Sin embargo, no te preocupes, solamente en casos excepcionales se requieren medicaciones, que es uno de los temores más frecuentes de los responsables de ese paciente pediátrico.

Para conocer más de las opciones de tratamiento, BeHealth contactó al psicólogo Gilvic Carmona, quien describió algunos de los métodos que suelen utilizarse para mejorar, no solo los síntomas de esas condiciones, sino también la calidad de vida de los pequeños.

El tratamiento psicoeducativo

Este método consiste en educar e informar, tanto al menor con un trastorno en el desarrollo, así como a su familia, sobre las características específicas de su patología. Allí, se aprenderá cómo gestionarla para minimizar sus efectos y cómo intervenir para mejorar su calidad de vida.

“Es un tratamiento en el cual se le enseña a evaluar sus emociones, a definirlas correctamente y a tener un pensamiento distinto”, explicó.

Terapia cognitiva conductual

Este método, ampliamente utilizado en adultos, también funciona en pacientes pediátricos y se basa, de acuerdo con la psiquiatría, en enseñar a las personas cómo manejar sus emociones y poner las cosas en perspectiva. En el caso de los más pequeños, sus nuevas luchas en factores como el regreso a clases.

“Es una terapia en la cual se le dan a los niños unos ejercicios y unas herramientas para que ese pensamiento irracional de preocupación sea transformado por un pensamiento que sea más manejable por él”, dijo a BeHealth el psicólogo.

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Ansiolíticos

Como ya te explicamos, los fármacos solo se utilizan cuando los casos de ansiedad, estrés y depresión son muy severos en los más pequeños. Los ansiolíticos son medicamentos con receta que se utilizan para aliviar la ansiedad y/o ayudar a conciliar el sueño, cuando hay problemas para dormir.

“Hay ocasiones donde hay que recurrir a algún tipo de medicación como los ansiolíticos y las benzodiacepinas cuando el niño es muy afectado para poder trabajar con esa situación”, explicó el experto.

Mindfulness

Esta es una técnica de meditación que consiste en observar la realidad en el momento presente, sin intenciones de juzgar y con plena apertura y aceptación. ¿Cómo le ayuda a los más chiquitos de la casa?

“Se le enseña al niño a estar en el momento presente, a identificar en qué parte de su cuerpo siente las emociones a través de dibujos y de pinturas. Ese niño puede ir trabajando con algo que se llama terapia del arte, con expresar esas emociones y esos miedos que lo primero que hay que hacer es identificarlos y que el niño poco a poco vaya comprendiendo algo que se conoce como desensibilización sistemática, que es el temor, ansiedad o  preocupación que tiene en el fondo”, indicó.

Terapia del juego

La psicología ha destacado esta técnica porque busca un ambiente de confianza, comprensión, respeto y responsabilidad, donde los pequeños expresen sus problemas mientras juegan, creando una relación que atienda las carencias de sus circunstancias personales y familiares.

“Se le enseña a los niños diferentes situaciones sociales como si fueran simulaciones con una obrita o unos jueguitos en los cuales pueden insertarse en la comunidad”, dijo.

Otros métodos

Según Carmona, tienen que ver con lo que él llamó “la terapia individual”, así como las “terapias de grupo”, a las que calificó de “excelentes”. 

“Las terapias de grupo permiten que ese niño vea cómo otro pequeño maneja o lidia las situaciones y aprende a lidiar con sus situaciones emocionales”, explicó.

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“Desafortunadamente, los seres humanos nos hemos acostumbrado a pensar en el pasado o a pensar en el futuro. Cuando uno trata de vivir el presente se nos hace un poco difícil porque estamos acostumbrados a vivir en el pasado o a pensar en el pasado. Yo soy un ferviente creyente del mindfulness. Yo lo uso mucho con mis pacientes. Los pacientes que usan la técnica notan la gran diferencia, porque aquí hay mucha ciencia detrás de todo esto. La mayoría de las personas creemos que no podemos controlar nuestros pensamientos y ese es el primer error que tenemos. El mindfulness de las cosas que más ayudan por lo menos a mis pacientes, es el control de los pensamientos, que es algo que aquellos de nosotros que hemos tenido la experiencia inicial de no poder controlar los pensamientos al lograr controlar los pensamientos es un paso gigante en nuestra psiquis, en nuestras emociones y en nuestra vida”, aseguró el galeno. 

De acuerdo con lo que ha descrito la psicología, esta técnica puede considerarse una filosofía de vida que incluye la práctica de la meditación. Según el doctor entrevistado, esta técnica lleva siento usada durante más de 5.000 años  y fue instaurada por Siddharta Gautama, Buda. ¿Para qué lo ideó?

“Lo utiliza precisamente para evitar el sufrimiento, para evitar el dolor, que es una de las herramientas más fuertes para mis pacientes que sufren de dolor, ya sea físico o emocional, porque verdaderamente te ayuda tremendamente a controlar ese dolor físico o mental”, destacó el neurólogo.

Es más, según el especialista, el mindfulness ha ido cogiendo auge porque, pese a que desde hace años es usada, solo hasta ahora en países como Estados Unidos y otras naciones del mundo como Puerto Rico se está prescribiendo para el tratamiento de condiciones de salud mental. “El mindfulness lo que trata de controlar es el famoso estrés y quien no vive en estrés en el mundo en que vivimos hoy”, se preguntó.

En la infancia

Aunque no lo creas, estas técnicas pueden beneficiar considerablemente a todas las edades, incluidos los más pequeños de la casa. Según el psiquiatra, los pequeños que se someten al mindfulness desde su infancia logran grandes beneficios en el transcurso de su vida. ¿Cuáles?

“Esto es aplicable a todo el mundo, inclusive a los niños. El niño que aprende a meditar o a o mindfulness desde tan pequeño tiene un adelanto brutal en su vida porque va a controlar sus emociones. Si nosotros no tenemos control de nuestra emociones, si nosotros no tenemos control de nuestro pensamiento, va a ser muy difícil lograr esa inteligencia emocional. Así que esto va de la mano con la inteligencia emocional”, destacó el neurólogo.

De hecho, el doctor aseguró que está técnica, aunque no reemplaza a los medicamentos prescritos para el tratamiento de salud mental, sí puede contribuir significativamente con la mejora de los síntomas molestos de la ansiedad, la depresión y el estrés.

“Independientemente que alguno esté medicado, ya sea con antidepresivo, con ansiolíticos o con otro tipo de medicamentos que usamos nosotros los psiquiatras, el mindfulness a mi me ayuda muchísimo con mis pacientes, especialmente la inmensa mayoría de los que tienen alguna condición mental como ansiedad: el que piensa en el futuro le da ansiedad, y el que piensa en el pasado le da depresión. Pero los pacientes psiquiátricos temen en alguna medida hasta el futuro, porque se sienten muchas veces, ya sea depresión, ya sea bipolaridad, ya sea ansiedad, se sienten limitados al tener dicha condición”, dijo el doctor.

Más detalles de esta técnica a continuación:

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Varias entidades que velan por la salud de los pacientes con Eii han descrito que un significativo porcentaje de ellos desarrollan ansiedad y depresión en algún momento de la enfermedad, ya sea por el impacto de recibir el diagnóstico o por la difícil sintomatología que caracteriza a estas condiciones.

Depresión

Identificar los síntomas es lo más importante. Si después de recibir la noticia empiezas a notar tristeza, ansiedad o sensación de “vacío” persistentes, así como sentimientos de desesperanza, negatividad e, incluso, sensación de culpa, desamparo y de no valer nada, puede que estés padeciendo depresión.

Por eso, es sumamente importante que desde el inicio de la enfermedad cuentes con apoyo psicológico. Ten en cuenta que la depresión podría empeorar tu condición e incluso, podría agravarse si no se trata desde el inicio.

En esa línea, puede que te prescriban una terapia cognitivo-conductual, que ayuda a cambiar de pensamiento y a modificar los patrones que te hacen desarrollar esos pensamientos que no puedes controlar. En la mayoría de los casos se suelen prescribir fármacos y tratamientos para esta población.

Ansiedad

Si estás experimentando sentimientos de pánico, preocupación y nerviosismo; además de sobre pensar mucho las cosas, y sientes que en ocasiones te bloqueas ante actividades del día a día, puede ser ansiedad.

Igualmente, es necesario que un psicólogo te la diagnostique. En caso de que sea, debes seguir al pie de la letra las instrucciones entregadas por el especialista, dado que si no se trata, al igual que la depresión, esta puede empeorar.

Algunos de los síntomas más comunes de este trastorno psicológico suelen ser:

• Sentir nerviosismo, ansiedad o agitación
• No poder dejar de preocuparse o no poder controlar la preocupación
• Preocuparse demasiado por cosas diferentes
• Tener dificultad para relajarse
• Estar tan inquieto que es difícil quedarse quieto
• Enojarse o irritarse con facilidad
• Sentir miedo como si fuera a suceder algo horrible

En cuanto a las estrategias para controlarla suelen prescribir ejercicios de relajación, yoga,ejercicios de actividad física y terapia cognitiva conductual.

El estrés

Aunque no siempre el estrés es malo, dado que es el sentimiento del cuerpo que permite estar alerta, los altos niveles del mismo pueden ser nocivos. Este se manifiesta de forma negativa cuando te impide la realización de una actividad normal.

El estrés se genera cuando se liberan hormonas conocidas como “la respuesta de lucha o huida”, que suelen causar alguna sintomatología adversa como el aumento de la frecuencia cardíaca, la transpiración y la tensión de los músculos.

Por lo general, los pacientes con Eii suelen desarrollar altos niveles de estrés debido a los síntomas de la enfermedad. Algunos tips para controlarlo:

• Aceptación de la situación
• Utilizar apoyo social, como pedirle a un amigo que se adapte a sus necesidades
• Relajación
• Conversación constructiva con uno mismo, como “hice lo mejor que pude”
• Soltar y continuar

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¿Cómo se relaciona con la depresión?

Según WebMd, la depresión afecta a aproximadamente el 40% de las personas con esquizofrenia, y alrededor del 80% experimentará al menos un episodio grave de depresión en algún momento. Este trastorno añade una capa adicional de complejidad, ya que los sentimientos de tristeza y pérdida de interés pueden interferir con la calidad de vida y las relaciones interpersonales.

La depresión no tratada puede llevar a la interrupción del tratamiento antipsicótico, empeorando así los síntomas de la esquizofrenia y aumentando el riesgo de recaídas y suicidio. La combinación de antidepresivos y terapia es comúnmente recomendada para abordar eficazmente esta dualidad.

¿Cómo se relaciona con el abuso de sustancias?

Casi la mitad de las personas con esquizofrenia también luchan contra el abuso de sustancias, ya sea alcohol, tabaco, cocaína o marihuana. Esta tasa de abuso es considerablemente más alta que en la población general. A menudo, las personas recurren a estas sustancias en un intento de gestionar su enfermedad mental, sin percatarse de que el abuso de sustancias puede exacerbar los síntomas de la esquizofrenia. Los programas que abordan simultáneamente los trastornos mentales y el abuso de sustancias, junto con medicamentos antipsicóticos, pueden ser fundamentales para abordar esta complejidad.

¿Cómo se relaciona con la ansiedad?

Hasta el 65% de las personas con esquizofrenia experimentan algún tipo de ansiedad, siendo el trastorno de ansiedad social, el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno de estrés postraumático, el trastorno de ansiedad generalizada y el trastorno de pánico los más comunes. La presencia de ansiedad puede dificultar el diagnóstico, ya que los síntomas a veces se ocultan detrás de las alucinaciones y delirios característicos de la esquizofrenia. Sin embargo, una vez diagnosticada, la terapia y los medicamentos pueden contribuir a gestionar eficazmente la ansiedad, mejorando la calidad de vida.

Comprender las complejas relaciones entre la esquizofrenia y la depresión, el abuso de sustancias y los trastornos de ansiedad es esencial para ofrecer un tratamiento integral y personalizado. La colaboración entre profesionales de la salud mental y programas especializados puede marcar la diferencia en la vida de aquellos afectados por esta intersección de condiciones.

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Fuentes: WebMD, Health Systems

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“Cuando recibes un diagnóstico como ese, especialmente si has sido una persona con un sistema inmunológico robusto toda tu vida y rara vez te enfermas, es como recibir una bofetada cósmica”, contó.

Lily destaca que al recibir este tipo de diagnóstico, es común pasar por las etapas del duelo, ya que se siente como una pérdida significativa. Puede comenzar con shock y negación, donde es difícil creer que esto esté sucediendo. En su caso, el shock inicial la llevó a buscar alternativas naturales en lugar de recurrir a la medicación convencional.

La fase de coraje también es una etapa importante. Puede experimentarse enojo debido a la creencia de que la enfermedad no debería estar ocurriendo o preguntándose por qué le sucede a uno en lugar de a otra persona. Es fundamental comprender que las enfermedades autoinmunes pueden afectar a personas de todo tipo, independientemente de su bondad o virtud.

Después de la fase de negociación, sigue un período de tristeza o incluso depresión. Lily experimentó debilidad en su cuerpo y fatiga extrema, lo que la llevó a buscar tratamiento médico convencional, lo cual marcó una diferencia significativa en su salud.

“Hay días en los que me siento tan agotada que apenas puedo hacer unas pocas tareas antes de sentirme completamente exhausta. Experimenté una debilidad que me hacía sentir como si cualquier movimiento pudiera causar un desgarro o un espasmo en mi cuerpo, algo que nunca antes me había sucedido”, explicó en su charla.

Conexión con las emociones

La conexión entre las emociones y la salud es evidente en su experiencia. Según ella, el estrés no gestionado puede afectar significativamente el cuerpo físico, y la ansiedad y la depresión pueden ser problemas importantes para aquellos que enfrentan enfermedades autoinmunes.

Asimismo, es importante abordar la ansiedad y la depresión. La ansiedad se manifiesta como una preocupación constante por el futuro, donde nuestra mente se inquieta pensando en lo que podría suceder. La depresión, por otro lado, a menudo está relacionada con aferrarse al pasado, ya sea extrañando tiempos mejores o lidiando con heridas no sanadas.

El poder del Mindfulness

Para Lily, el mindfulness se presenta como una herramienta poderosa para abordar estas emociones y mejorar la calidad de vida:

“Vivir en el futuro o en el pasado no es saludable, ya que puede afectar nuestra salud emocional y física. Aquí es donde el mindfulness entra en juego. El mindfulness es una técnica que nos enseña a traer nuestra atención al momento presente, al «aquí y ahora». No sabemos lo que depara el futuro, y estar ansiosos por ello no cambia nada. Tampoco podemos cambiar el pasado, pero podemos aprender a vivir en el presente de una manera más consciente y saludable”.

El mindfulness enseña a concentrarse en el momento presente, lo que es esencial para reducir la ansiedad relacionada con el futuro y la depresión relacionada con el pasado. Esto permite un enfoque en el autocuidado, tanto para la salud física como para la salud emocional, ya que ambas están interconectadas. La gestión efectiva del estrés es fundamental, ya que el estrés puede exacerbar una amplia gama de condiciones de salud, incluyendo enfermedades gastrointestinales y cardiovasculares.

El mindfulness te permite tomar un respiro, inhalar y exhalar, y traer tu mente al momento presente. Preguntarte «dónde estoy ahora» es una práctica valiosa, ya que te ayuda a evitar pensar en cosas que aún no han ocurrido y que tal vez nunca sucedan. Preocuparse en exceso por el futuro puede generar ansiedad y afectar negativamente tu bienestar físico.

Lily destaca la importancia de soltar expectativas poco realistas y aprender a aceptar que no todo será perfecto. Llegar a un punto en la vida en el que no es necesario impresionar a nadie, ni siquiera a uno mismo, puede ser liberador.

“Aprender a respirar de manera consciente y profunda, como lo hacen los bebés, puede ser una forma efectiva de relajar el cuerpo y la mente, reducir el estrés y vivir de manera más plena”.

El mindfulness nos invita a ralentizar y estar plenamente presentes en cada actividad que realizamos, en lugar de estar constantemente abrumados por múltiples tareas y expectativas. También nos enseña a desconectarnos de la sobreinformación y a reconocer nuestras emociones sin culparnos por ellas.

La respiración puede ser una herramienta valiosa para gestionar el dolor, el enojo, el malestar, el miedo y la ansiedad. La respiración consciente es un ancla que nos permite centrarnos en el momento presente y reconocer lo que está sucediendo en nuestra mente y en nuestro cuerpo.

“Identificar la emoción que nos está desequilibrando es un paso importante para abordarla de manera efectiva. A menudo, las personas culpan a situaciones externas o a otras personas por su malestar, sin darse cuenta de que la clave para la gestión de las emociones comienza con la autoconciencia. Cuando reconocemos nuestras emociones y su impacto en nosotros, estamos en una mejor posición para tomar medidas positivas para abordarlas”.

La práctica del mindfulness nos ayuda a cultivar la autorreflexión, la resiliencia y la toma de decisiones conscientes, lo que puede marcar una gran diferencia en nuestra capacidad para manejar las dificultades de la vida y vivir de manera más consciente y equilibrada.

Además, reconocer nuestras emociones y no culparnos por ellas es un paso fundamental para cuidar de nuestra salud mental. Las emociones son una parte natural de la experiencia humana, y aceptarlas y comprenderlas es esencial para vivir una vida plena y equilibrada.

Respira con Lily

La aplicación «Respira con Lily» es una herramienta valiosa para aquellos que desean explorar el mindfulness y la meditación. Ofrece meditaciones de diferentes duraciones y en inglés y español, lo que la hace accesible para un público amplio. Además, Lily enfatiza la importancia de buscar ayuda cuando sea necesario y la utilidad de los grupos de apoyo.

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En entrevista exclusiva con este medio, la Dra. María Eugenia García Ayala, destacada neuróloga y subespecialista en Dolores de Cabeza, profundizó en la conexión conexión entre ansiedad, estrés y migraña, despejando mitos y aportando claridad a este vínculo.

“En relación a la ansiedad y el estrés, es crucial entender que si bien estos pueden desencadenar migrañas en pacientes diagnosticados, no significa que cualquier persona experimentará dolores de cabeza debido a estas emociones”, dijo a BeHealth.

De acuerdo con la especialista, es más bien un fenómeno específico para aquellos con diagnóstico de migraña. “La presencia de ansiedad en sí misma está vinculada a episodios de migraña más severos, problemas de concentración y un mayor riesgo de abuso de medicamentos”. 

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En esta misma línea, la presencia de ansiedad no solo está relacionada con la migraña, sino que también puede influir en su severidad y en la experiencia del paciente. Se ha observado que las personas con diagnóstico de migraña que también experimentan ansiedad pueden tener ataques de migraña más intensos y frecuentes. Además, la ansiedad puede tener un impacto negativo en la concentración y la función cognitiva, lo que podría afectar la calidad de vida de quienes padecen migraña.

Por lo tanto, el objetivo radica en reducir la respuesta fisiológica al estrés y la ansiedad. Estas técnicas pueden incluir la práctica regular de la relajación, la meditación, la respiración profunda y la terapia cognitivo-conductual, entre otras.

Consejos para prevenir el estrés, ansiedad que provocarían migraña

De acuerdo con la especialista, las recomendaciones para pacientes que sufren migrañas con frecuencia, existen diversas técnicas y consejos relacionados con el estilo de vida que podrían ser útiles. 

Entre ellos, resaltó la entrevistada a este medio, “las técnicas de relajación son esenciales para evitar el estrés, y prestar atención a la alimentación también juega un papel importante”. 

Tener en cuenta el estilo de vida

“Es crucial destacar la relevancia del ejercicio regular para los pacientes con migraña”, agregó la doctora y señaló que el ejercicio no solo mejora el funcionamiento físico y ayuda a reducir el índice de masa corporal, sino que también beneficia la ansiedad, la depresión y la calidad de vida en general. 

Además, mencionó la doctora García Ayala, que estrategias como la meditación, el mindfulness, la relajación y la identificación de factores desencadenantes pueden tener un impacto considerable en el manejo de la migraña.

“Prácticas como la relajación muscular, la yoga y una respiración adecuada se asocian con la minimización de estos episodios”.

Adicionalmente, se recomienda descansar lo suficiente (7-9 horas diarias), seleccionar opciones alimenticias saludables, evitar omitir comidas y establecer horarios regulares, así como mantener una hidratación adecuada.

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