Semana 25: El bebé responde a tu voz
A las 25 semanas de embarazo, o 23 semanas después de la concepción, tu bebé podría responder a los sonidos que le son familiares, tales como tu voz, mediante el movimiento.
Tu bebé pasa la mayor parte del tiempo de sueño en la fase de movimientos oculares rápidos (MOR), en la cual los ojos se mueven rápidamente aunque los párpados estén cerrados. Las uñas también empiezan a crecer, aunque tardarán un poco en llegar a la punta de los dedos.
Su cabeza sigue siendo demasiado grande en comparación con el resto del cuerpo aunque, poco a poco, irá adquiriendo un tamaño más proporcionado. Durante la semana 25 de embarazo, el bebé mide aproximadamente 30,5 centímetros desde la punta de la cabeza hasta los talones y su peso promedio es de 660 gramos.
A medida que avanza la gestación, el funcionamiento de los riñones mejora y la composición del líquido amniótico producido se vuelve cada vez más similar en composición a la orina. El flujo sanguíneo del cordón umbilical y la placenta también regulan la temperatura del bebé, manteniéndola lo más cerca posible de la temperatura corporal de la madre.
Cómo cambia tu cuerpo en la semana 25 de embarazo
En la semana 25 tu barriguita ya es una realidad para todos, por lo que puede ser el momento adecuado para empezar a lucir tu ropa premamá. Sea como sea, procura no llevar cosas demasiado estrechas o sintéticas. Tu ropa interior, preferiblemente de algodón, debe ser lo más cómoda posible y adaptarse perfectamente a los cambios que está experimentando tu cuerpo, ya que alberga una nueva vida que va creciendo.
Es posible que ya hayas sufrido algunos episodios de acidez estomacal y reflujo gástrico. Estos se deben a la hormona del embarazo progesterona, que relaja los músculos del tracto digestivo y ralentiza la digestión.