Konecta Perú, un modelo de prevención del hostigamiento sexual laboral
Un reciente estudio desarrollado en el Perú por Konecta, en colaboración con la Universidad San Martín de Porres, ha revelado un dato crucial: prevenir el hostigamiento sexual laboral (HSL) no solo mejora el entorno laboral, sino que también genera beneficios económicos significativos para las empresas. Este hallazgo abre un debate sobre cómo la inversión en políticas preventivas puede ser tanto una necesidad ética como una estrategia empresarial rentable.
Impacto financiero de prevenir el hostigamiento sexual laboral
La investigación, pionera a nivel global, cuantifica el impacto económico de las políticas de prevención en términos de productividad y retorno de inversión. Los resultados son claros:
- Reducción del 11,6% en los costos asociados a la pérdida de productividad.
- Recuperación de 967 días laborales.
- Retorno positivo de entre S/1,12 y S/1,24 por cada sol invertido en prevención.
Estos datos muestran que prevenir el hostigamiento no solo protege a los colaboradores, sino que también fortalece la rentabilidad empresarial. Las políticas preventivas se traducen en una mejora tangible en la eficiencia y el bienestar organizacional.
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El caso de éxito de Konecta Perú
Konecta Perú, con más de 13 años en el mercado, ha liderado esta transformación mediante su programa Basta Ya!, diseñado para combatir la violencia y el acoso laboral. Entre 2021 y 2023, la empresa logró una reducción del 33,8% en la prevalencia del hostigamiento sexual, consolidando su compromiso con la diversidad, equidad e inclusión.
Este programa incluye:
- Capacitaciones y sensibilización en todos los niveles organizacionales.
- Asesoramiento legal y apoyo psicológico para las víctimas.
- Canales confidenciales de denuncia y seguimiento.
- Promoción de un ambiente de trabajo inclusivo y seguro.
El resultado: un ambiente laboral más respetuoso y productivo que sirve como modelo para otras empresas en la región.
Consejos para prevenir el hostigamiento sexual laboral
La CEO de Konecta Perú, Violeta Orozco, destaca cuatro estrategias clave para abordar este problema de manera efectiva:
- Desarrollar políticas claras: Establecer normas específicas contra el hostigamiento sexual, con definiciones precisas y sanciones transparentes.
- Implementar programas de prevención: Realizar capacitaciones regulares para educar sobre conductas inapropiadas y fomentar un entorno consciente.
- Construir un ambiente de seguridad: Crear un espacio laboral que promueva el respeto, la confianza y el apoyo mutuo.
- Comunicar los canales de apoyo: Asegurar que los colaboradores conozcan cómo denunciar incidentes de forma confidencial y sin temor a represalias.
Estas medidas no solo previenen incidentes, sino que también generan confianza y compromiso en los equipos.
Un llamado a la acción empresarial
El estudio de Konecta busca inspirar a otras organizaciones a adoptar políticas preventivas como una parte integral de sus estrategias corporativas. La prevención del hostigamiento sexual laboral es un paso fundamental hacia la creación de un ambiente laboral seguro y equitativo.
Un entorno libre de acoso no es solo un ideal ético, sino una necesidad práctica. La violencia basada en género en el trabajo afecta no solo a las víctimas, sino también a la productividad y reputación de las empresas. Invertir en prevención, como demuestra el caso de Konecta, no solo es posible, sino también rentable.
El hostigamiento sexual laboral es una problemática global que requiere atención urgente. Las cifras del estudio de Konecta demuestran que prevenir este tipo de violencia no solo mejora la calidad de vida de los colaboradores, sino que también genera beneficios financieros directos.
Erradicar el acoso es un compromiso que las empresas deben asumir no solo por obligación moral, sino también por el impacto positivo que tiene en sus operaciones. Un ambiente laboral seguro y respetuoso beneficia a todos: empleados, empresas y la sociedad en su conjunto.
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