Infecciones de oído en niños, ¿son necesarios siempre los antibióticos?
Las infecciones de oído son una dolencia común en los niños pequeños, y a menudo generan preocupación en los padres. La pregunta clave que surge es si siempre se requieren antibióticos para tratar esta afección. Basado en la experiencia y conocimiento de la Dra. Nipunie S. Rajapakse, M.D., M.P.H., una destacada experta en enfermedades infecciosas pediátricas del Mayo Clinic Children’s Center en Rochester, Minnesota, exploramos esta cuestión.
Los niños a menudo desarrollan infecciones de oído molestas después de una enfermedad viral. «Una historia típica es que un niño tiene fiebre, goteo nasal y tos durante unos días y parece estar mejorando. Pero luego, la fiebre regresa repentinamente y el niño se queja de dolor de oído», explica la Dra. Rajapakse.
Tirar del oído, estar inquieto o comer y beber menos de lo habitual pueden ser señales no verbales de que un bebé o niño pequeño está experimentando dolor de oído. «Esto puede suceder porque el niño ha desarrollado una infección bacteriana de oído secundaria, o porque adquirieron un nuevo virus justo cuando estaban recuperándose del primero», dice la Dra. Rajapakse.
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Si sospechas que tu hijo podría tener una infección leve de oído, primero puedes intentar darles dosis infantiles de acetaminofén o ibuprofeno para reducir el dolor. «También puedes intentar aplicar un paño tibio sobre el oído periódicamente durante uno o dos días para ver si eso ayuda a reducir el dolor mientras el cuerpo combate la infección», dice la Dra. Rajapakse.
Sin embargo, si tu hijo está experimentando un dolor de oído severo o drenaje del oído, o parece estar empeorando, entonces es hora de buscar atención médica. Solo un profesional de la salud puede diagnosticar definitivamente una infección de oído examinando de cerca el tímpano del niño. Y si el oído está infectado, un profesional de la salud puede determinar si un antibiótico podría ser útil.
«En el 90% al 95% de los niños, las infecciones de oído generalmente mejoran por sí solas porque el sistema inmunológico combate la infección. Por lo tanto, una receta de antibiótico no siempre es necesaria incluso si se diagnostica a tu hijo con una infección de oído», dice la Dra. Rajapakse.
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Fuente: Mayo Clinic
