Implantes personalizados: una revolución de la sangre que podría reparar huesos
Una herramienta que dirige moléculas para activar la curación natural de tejidos
Publicado en Advanced Materials, este avance fusiona biología natural con impresión 3D, empleando péptidos anfifílicos sintéticos para mejorar la capacidad regenerativa del hematoma formado por sangre.
En la Universidad de Nottingham, un grupo de científicos han desarrollado un material regenerativo que emplea sangre extraída de un paciente para crear implantes personalizados con potencial para reparar huesos y tratar diversas lesiones. El proyecto utiliza moléculas de péptidos capaces de guiar procesos biológicos fundamentales para la curación natural de tejidos.
En condiciones normales, el cuerpo humano posee una notable capacidad para reparar tejidos tras lesiones menores, gracias a un entorno biológico complejo que comienza con la sangre líquida. Este proceso da origen al hematoma regenerativo sólido (RH), un microambiente natural compuesto por células, macromoléculas y factores clave que trabajan en armonía para facilitar la regeneración del tejido dañado. Según los investigadores, el RH es fundamental en este proceso, ya que organiza y dirige los recursos biológicos necesarios para la curación.
A partir de esta base, los científicos desarrollaron un método innovador que combina péptidos sintéticos con sangre completa extraída directamente del paciente. Este avance permite crear un material regenerativo que aprovecha las propiedades biológicas naturales de la sangre para potenciar la reparación de los tejidos. Al integrar estos péptidos con los elementos celulares y moleculares propios del organismo, el enfoque ofrece una solución avanzada para optimizar los procesos de regeneración incluso en condiciones más desafiantes.
Te puede interesar: Análisis de sangre para detectar la osteoartritis 8 años antes de que aparezcan signos en radiografías
Álvaro Mata, catedrático de Ingeniería Biomédica y Biomateriales en la Universidad de Nottingham y líder del estudio, explicó que el proyecto partió de una perspectiva diferente a la convencional. “Por años, los enfoques tradicionales han intentado recrear de forma sintética el entorno regenerativo natural, un desafío enorme debido a su complejidad. En este caso, nuestra propuesta fue colaborar con la biología en lugar de intentar replicarla”, señaló el especialista en un comunicado oficial.
Este avance se centra en utilizar los propios mecanismos naturales de curación como base para fabricar materiales regenerativos. Los investigadores han denominado este enfoque como «biocooperativo», ya que busca diseñar materiales que se integren y potencien las capacidades del sistema biológico. Según Álvaro Mata, este método marca un cambio significativo en la medicina regenerativa, al optar por trabajar en armonía con los procesos naturales de la biología en lugar de intentar reproducirlos de manera artificial.
Cosimo Ligorio, coautor del estudio y miembro de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Nottingham, destacó la relevancia práctica del proyecto. “La posibilidad de convertir de forma sencilla y segura la sangre de las personas en implantes altamente regenerativos es realmente emocionante. La sangre es prácticamente gratuita y se puede obtener fácilmente de los pacientes en volúmenes relativamente altos”, señaló. Este enfoque podría transformar el acceso a materiales regenerativos, haciéndolos más eficientes y accesibles.
Actualmente, el equipo está desarrollando herramientas para convertir la sangre en materiales regenerativos directamente en entornos clínicos, como hospitales y centros médicos. Según Ligorio, el objetivo principal es “establecer un conjunto de herramientas accesibles que permitan generar implantes ricos en factores regenerativos y adaptables a diferentes necesidades médicas”. Aunque las pruebas iniciales se realizaron en modelos animales, los resultados obtenidos indican un alto potencial para su aplicación en humanos, abriendo nuevas posibilidades para la medicina regenerativa.
También puedes leer: Se evidencia importante relación entre la médula ósea y las enfermedades cardíacas