Hitos del desarrollo de tu hijo desde el nacimiento hasta el primer año

Durante el primer año de vida de tu bebé, experimentará un notable desarrollo en diversas áreas clave, desde habilidades motoras hasta cognitivas y sociales. Cada mes trae consigo nuevos hitos que marcan su progreso hacia la exploración del mundo que lo rodea y el establecimiento de conexiones con las personas cercanas. Observar estos cambios no solo es emocionante, sino también crucial para asegurarte de que tu hijo esté alcanzando sus metas de desarrollo de manera saludable y a su propio ritmo.

Primer mes

Durante el primer mes de vida, tu bebé comenzará a desarrollar una serie de habilidades motoras y sensoriales. En cuanto al movimiento, es común que agite sus brazos con movimientos bruscos y erráticos, lleve sus manos al alcance de sus ojos y boca, y mueva la cabeza de lado a lado mientras está acostado boca abajo. Su cabeza puede caer hacia atrás si no tiene soporte adecuado y mantendrá sus manos empuñadas con fuerza, además de presentar movimientos reflejos fuertes.

En los aspectos visuales y auditivos, tu bebé enfocará a una distancia de 20 a 30 cm, aunque sus ojos pueden desviarse y cruzarse ocasionalmente. Preferirá patrones en blanco y negro o de alto contraste, y mostrará una inclinación hacia los rostros humanos. Su audición estará completamente madura y reconocerá algunos sonidos, volteando hacia aquellos que le resulten familiares. En cuanto al olfato y el tacto, tu bebé preferirá los olores dulces y evitará los amargos o ácidos. Reconocerá el aroma de la leche materna y preferirá las sensaciones suaves, no le gustará que lo carguen de manera fuerte o abrupta.

Si durante la segunda, tercera o cuarta semana de vida muestra señales de retraso, como succionar poco, no parpadear ante luces brillantes, no enfocar ni seguir objetos cercanos en movimiento, moverse poco, tener extremidades excesivamente flexibles o blandas, temblar la mandíbula constantemente o no responder a sonidos fuertes, debes informar al pediatra.

Tres meses

A los tres meses, tu bebé mostrará avances significativos en su desarrollo motor, visual, auditivo, social y emocional. En cuanto al movimiento, levantará la cabeza y el pecho cuando esté acostado boca abajo, sostendrá el torso con sus brazos, estirará las piernas y pateará, abrirá y cerrará las manos, y empujará sus piernas hacia abajo al apoyar los pies en una superficie firme. También llevará las manos a la boca, empujará objetos colgantes y agarrará y agitará juguetes.

Visualmente, observará los rostros con atención, seguirá objetos en movimiento y reconocerá personas y objetos familiares a distancia, comenzando a coordinar manos y ojos. En cuanto a la audición, sonreirá al sonido de tu voz, empezará a balbucear e imitará algunos sonidos, girando la cabeza hacia la dirección de los mismos. Socialmente, desarrollará una sonrisa social, disfrutará jugar con otras personas, será más expresivo y comunicativo, e imitará movimientos y expresiones faciales.

Si a esta edad parece no responder a sonidos fuertes, no observa sus manos a los dos meses, no sonríe al sonido de tu voz, no sigue objetos en movimiento con los ojos, no agarra ni sostiene objetos, no sonríe a las personas, no puede sostener bien la cabeza, no balbucea, no se lleva objetos a la boca, no empuja las piernas hacia abajo al colocar los pies sobre una superficie firme, tiene problemas para mover uno o ambos ojos en todas las direcciones, cruza los ojos la mayor parte del tiempo, no presta atención a rostros nuevos o parece asustado con entornos nuevos, o aún tiene el reflejo tónico del cuello a los cuatro o cinco meses, debes informar al pediatra.

Siete meses

A los siete meses, tu bebé continuará desarrollándose rápidamente. En cuanto al movimiento, se volteará en ambos sentidos, se sentará apoyándose en sus manos y luego sin apoyo, apoyará todo el peso de su cuerpo sobre las piernas, agarrará cosas con una mano, transferirá objetos de una mano a otra y usará el agarre de rastrillo. Visualmente, desarrollará la visión a todo color, mejorará su capacidad de seguir objetos en movimiento y su visión a distancia madurará.

En el ámbito del lenguaje, responderá a su nombre, comenzará a responder cuando le digan “no”, distinguirá emociones según el tono de voz, responderá a sonidos haciendo sus propios sonidos, usará la voz para expresar alegría y desagrado y balbuceará consonantes seguidas. Cognitivamente, encontrará objetos parcialmente ocultos, explorará con las manos y la boca y se esforzará por alcanzar objetos fuera de su alcance. Social y emocionalmente, disfrutará los juegos sociales, se interesará por imágenes en el espejo, responderá a las expresiones de emoción de otras personas y a menudo se mostrará feliz.

Informa al pediatra si tu bebé parece muy rígido, demasiado flexible, su cabeza sigue yéndose hacia atrás cuando está en la posición de sentado, alcanza cosas solo con una mano, se rehúsa a ser abrazado, no muestra afecto hacia ti, no disfruta la cercanía de las personas, uno o ambos ojos se mueven hacia adentro o hacia afuera constantemente, presenta lagrimeo persistente, secreción ocular o sensibilidad a la luz

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Además, si no responde a los sonidos a su alrededor, tiene dificultad para llevar objetos a la boca, no gira la cabeza para identificar sonidos a los cuatro meses, no se voltea en ninguna dirección a los cinco meses, parece inconsolable por las noches después de los cinco meses, no sonríe espontáneamente a los cinco meses, no puede sentarse con ayuda a los seis meses, no se ríe ni emite chillidos a los seis meses, no intenta agarrar objetos activamente entre los seis y los siete meses, no sigue los objetos con ambos ojos cuando están cerca o lejos, no soporta peso en las piernas a los siete meses, no trata de llamar la atención a través de alguna acción a los siete meses, no balbucea a los siete meses o no muestra interés en juegos como el de esconderse y luego aparecer a los ocho meses.

Primer año

Al cumplir el primer año, tu bebé alcanzará varios hitos importantes. En cuanto al movimiento, podrá sentarse sin ayuda, arrastrarse hacia adelante apoyado en su vientre, ponerse en la posición de cuatro puntos, gatear apoyado en sus manos y rodillas, pasar de estar sentado a gatear o ponerse boca abajo, levantarse por sí mismo hasta pararse, caminar agarrándose de los muebles, pararse momentáneamente sin apoyo y dar dos o tres pasos sin apoyo.

En las habilidades de las manos y los dedos, usará el agarre de pinza, hará chocar dos cubos entre sí, colocará objetos en un contenedor, sacará objetos del contenedor, soltará objetos voluntariamente, empujará cosas con su dedo índice y tratará de imitar trazos. En cuanto al lenguaje, prestará cada vez más atención al habla, responderá a solicitudes verbales simples, responderá cuando le digan “no”, utilizará gestos simples, balbuceará con inflexiones, dirá “papá” y “mamá”, usará exclamaciones como “¡oh-oh!” y tratará de imitar palabras.

Cognitivamente, explorará objetos de muchas maneras diferentes, encontrará fácilmente objetos ocultos, mirará hacia la fotografía correcta cuando se nombra la imagen, imitará gestos y comenzará a usar objetos correctamente. Social y emocionalmente, se mostrará tímido o ansioso con extraños, llorará cuando su madre o padre se vayan, disfrutará imitar a las personas en juegos, mostrará preferencias específicas hacia ciertas personas y juguetes, pondrá a prueba las reacciones de sus padres, puede sentir miedo en algunas situaciones, preferirá a la madre o al cuidador principal, repetirá sonidos o gestos para llamar la atención, se alimentará con los dedos y extenderá el brazo o la pierna para ayudar cuando lo están vistiendo.

Informa al pediatra si tu bebé no gatea, arrastra un lado del cuerpo mientras gatea durante más de un mes, no se mantiene de pie con apoyo, no busca objetos que alguien esconde frente a su vista, no dice palabras sueltas como “mamá” o “papá”, no aprende a usar gestos como decir adiós con la mano o mover la cabeza para decir no, o no apunta hacia objetos o imágenes. Recuerda que cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, y estos hitos ofrecen una guía general.

A medida que celebras cada logro de tu bebé durante su primer año, recuerda que cada paso en su desarrollo es único y digno de celebración. Mantener una comunicación abierta con el pediatra te permitirá detectar cualquier señal de alerta temprana y brindar el apoyo necesario para el bienestar integral de tu pequeño. Disfruta de cada momento de descubrimiento y crecimiento junto a tu bebé mientras continúa explorando y aprendiendo en este emocionante primer año de vida.

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