Please ensure Javascript is enabled for purposes of website accessibility
Bienestar General

Emociones y tecnología: cómo la conexión digital impacta el bienestar

En un mundo donde la tecnología está al alcance de todos, la relación entre nuestras emociones y el uso de dispositivos como los celulares se ha vuelto más estrecha y, a menudo, problemática.

El incremento en la dependencia tecnológica ha derivado en una serie de efectos negativos en la salud mental, entre los que destacan la ansiedad, el desánimo, y la pérdida de productividad.

Tecnología y salud mental: un vínculo que preocupa

La conexión entre la tecnología y la salud mental no es nueva, pero se ha vuelto más evidente en los últimos años.

Muchas personas comienzan su día mirando el celular y lo terminan de la misma manera.

Este hábito está creando un patrón adictivo que afecta tanto el estado de ánimo como la capacidad de concentración.

Durante situaciones emocionales difíciles, como rupturas amorosas o crisis personales, el uso excesivo de la tecnología puede intensificar los sentimientos de ansiedad e inseguridad.

A menudo, las personas buscan refugio en las redes sociales o en aplicaciones de mensajería, con la esperanza de aliviar su malestar.

Sin embargo, lejos de mejorar la situación, este comportamiento puede agravar los problemas emocionales.

El mecanismo adictivo de la tecnología

Los dispositivos móviles están diseñados para mantenernos enganchados. Sonidos, luces, notificaciones constantes, y el acceso infinito a contenido en redes sociales activan el sistema de recompensas del cerebro, generando una satisfacción momentánea que rápidamente se desvanece, creando una necesidad de más estimulación.

Este ciclo de adicción no solo roba tiempo valioso, sino que también eleva los niveles de estrés y ansiedad.

Lee: Impacto profundo de las redes sociales en niños y adolescentes

Impacto en niños y adolescentes

Aunque los estudios sobre el impacto de la tecnología en los trastornos de atención en niños son limitados, los expertos coinciden en que los más jóvenes son especialmente vulnerables a estos mecanismos adictivos.

El uso excesivo de tecnología en la infancia puede impedir el desarrollo de habilidades emocionales y sociales, y contribuir a problemas de concentración e irritabilidad.

A largo plazo, cuando los hijos entran en la preadolescencia, el abuso de las pantallas durante el desarrollo cognitivo se suele traducir en que no tienen aficiones, nada les interesa especialmente y no son capaces de aburrirse, lo cual tiene implicaciones graves.

Por otra parte, son menos creativos, tienen menos inquietudes y a veces, las más graves, no han logrado simbolizar el mundo en sus mentes.

Es fundamental que los niños aprendan a aburrirse, a entretenerse solos (sin nada, estando con ellos mismos), a esperar, a mantener la atención, a frustrarse y a elegir. 

Relaciones personales y sociales en riesgo

El uso excesivo del celular no solo afecta la salud mental individual, sino que también deteriora las relaciones personales.

La necesidad constante de estar conectados a través de dispositivos puede hacer que las personas se sientan menos valoradas y comprendidas en sus interacciones cara a cara, debilitando los vínculos emocionales y sociales.

Pautas para un uso saludable de la tecnología

Superar la adicción a la tecnología no implica renunciar a ella, sino aprender a utilizarla de manera consciente y controlada. Compartimos algunas recomendaciones clave:

  1. Desactiva las notificaciones: Las notificaciones son una fuente constante de distracción. Desactivarlas, te permitirá controlar mejor cuándo y cómo usas tu teléfono.
  2. Evita el celular al despertar y antes de dormir: Los primeros 30 minutos de la mañana y la última hora antes de dormir son cruciales. Evita el uso de dispositivos durante este tiempo para reducir la estimulación innecesaria.
  3. Prioriza las relaciones humanas: Cuando estés con otras personas, guarda el celular. Esto te ayudará a fortalecer tus relaciones y a vivir el momento presente.
  4. Limita el tiempo de uso: Utiliza tu celular solo cuando no tengas tareas importantes que realizar y establece un tiempo limitado para su uso.
  5. Usa la tecnología con propósito: Cada vez que utilices tu dispositivo, asegúrate de hacerlo con un propósito claro y productivo, en lugar de como una distracción.

La clave está en la gestión emocional

El uso adecuado de la tecnología comienza con una buena gestión emocional. Si eres capaz de manejar tus emociones, la tecnología se convertirá en una herramienta que te beneficia, en lugar de perjudicarte.

Si sientes que la tecnología está afectando negativamente tu bienestar, considera buscar apoyo profesional para realizar un cambio positivo en tu vida.

En última instancia, la tecnología puede ser tanto un aliado como un enemigo, dependiendo de cómo la utilicemos.

Mantener un equilibrio saludable entre su uso y el manejo de nuestras emociones es esencial para disfrutar de una vida plena y satisfactoria en la era digital.

Te puede interesar: ¿Podrían afectar tu salud mental las redes sociales?

Chiara Tarafa

Soy Biomédica y Periodista Multimedios, actualmente culminando mis estudios en periodismo en la Universidad del Sagrado Corazón de Puerto Rico. Por otra parte, tengo un Bachillerato en Ciencias con especialidad en Ciencias Biomédicas de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico. Esta combinación me permite ejercer mi pasión de educar y trabajar hacia un mejor sistema de salud para Puerto Rico.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba