Departamento de Salud de Puerto Rico declara epidemia de influenza en la isla
El Departamento de Salud de Puerto Rico anunció hoy la declaración de una epidemia de influenza en la isla, marcando una temporada inusualmente alta de casos de influenza. Durante una conferencia de prensa, las autoridades de salud revelaron datos alarmantes que indican un aumento significativo en los casos de influenza en comparación con años anteriores.
La temporada de influenza comenzó en julio y ha continuado en constante aumento. Hasta la fecha, se han registrado 25,900 casos de influenza en Puerto Rico. Estos casos se distribuyen en todas las edades. Las regiones más impactadas incluyen Caguas y Ponce.
«Esta enfermedad respiratoria es potencialmente mortal. De hecho, cuando revisamos las estadísticas, notamos que la influenza representó la octava causa de muerte por neumonía en Puerto Rico en el año anterior. Esto sigue siendo válido para todas las enfermedades respiratorias, y es de vital importancia proteger a nuestros adultos mayores de 65 años y a las personas que padecen condiciones de salud crónicas, como la diabetes, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, el asma, entre otras. Es crucial comprender que la vacunación sigue siendo el recurso que evita la mortalidad y previene hospitalizaciones», enfatizó el Dr. Carlos MEllado, Secretario de Salud.
“Si presentas síntomas como congestión nasal, dolor en el cuerpo o tos productiva o no productiva, lo más importante es no asistir al trabajo ni enviar a tus hijos a la escuela, y en su lugar, acudir al médico. Esto cobra aún mayor relevancia si estás a cargo del cuidado de una persona de la tercera edad», resaltaron.
En esta línea, las autoridades de salud enfatizaron la importancia de la vacunación como una medida efectiva para prevenir la mortalidad y las hospitalizaciones relacionadas con la influenza. También señalaron que, a pesar de la situación no hay escasez de pruebas, los hospitales no están sobrecargados y aún hay capacidad disponible.
Asimismo, el Departamento de Salud de Puerto Rico ha implementado diversas estrategias para abordar esta epidemia, incluyendo la flexibilización de las recetas para garantizar que los pacientes reciban el tratamiento necesario. También se han promovido medidas de prevención, como el lavado de manos, el distanciamiento social y la recomendación de no asistir al trabajo o la escuela en caso de síntomas de influenza.
En cuanto a la disponibilidad de la vacuna contra la influenza, se informó que la vacuna está ampliamente disponible en farmacias, centros de vacunación y consultorios médicos. Se alentó a los padres a vacunar a sus hijos, ya que la población pediátrica se ha convertido en un grupo importante en la propagación de la enfermedad.
En términos de tratamiento, se mencionó que existen opciones efectivas para tratar la influenza, incluyendo medicamentos antivirales. La disponibilidad de pruebas de diagnóstico también se aseguró, y se señaló que los hospitales no están abrumados por pacientes de influenza en este momento.
“En cuanto a la vacunación, es importante destacar que la vacuna contra la influenza está indicada a partir de los 6 meses de edad, y se han administrado más de 289,000 dosis hasta la fecha. Es alentador ver que más de la mitad de estas dosis han sido administradas a personas mayores de 65 años. Sin embargo, es esencial señalar que la población actualmente más afectada y que, de alguna manera, está contribuyendo a la propagación del virus, es la población pediátrica”, dijo el Departamento de Salud de la isla.
El Departamento de Salud está tomando medidas continuas para abordar esta epidemia y promover la salud pública en Puerto Rico. Se insta a la población a tomar precauciones y vacunarse como una medida efectiva para reducir la mortalidad y las complicaciones asociadas con la influenza.
Para obtener más información sobre la vacunación contra la influenza y las medidas de prevención, se recomienda a la comunidad consultar con su proveedor de atención médica o visitar las instalaciones de vacunación disponibles en la isla.
El Departamento de Salud de Puerto Rico seguirá monitoreando la situación de cerca y proporcionando actualizaciones a medida que sea necesario.
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