¿Cuándo sospechar de la psoriasis?

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que puede manifestarse con enrojecimiento, descamación y picazón. Aunque no es contagiosa, su impacto en la calidad de vida es significativo. Según la Dra. Tania González, dermatóloga, “la psoriasis no solo afecta la piel, sino también las uñas y, en algunos casos, las articulaciones, causando dolor e inflamación”.
Síntomas clave para identificar la psoriasis
Las señales de alerta más comunes incluyen:
- Placas rojas con escamas en codos, rodillas, cuero cabelludo y espalda.
- Picazón, ardor o sensibilidad en las lesiones.
- Uñas engrosadas, con hoyuelos o decoloración.
- Dolor en las articulaciones, que puede indicar artritis psoriásica.
“La psoriasis puede confundirse con otras afecciones como la dermatitis o la caspa. Si las lesiones son persistentes y no mejoran con tratamientos convencionales, es importante acudir a un especialista”, enfatiza la Dra. González.
Factores que pueden desencadenarla
Aunque la causa exacta de la psoriasis no está completamente clara, se ha identificado un fuerte componente genético. Además, ciertos factores pueden desencadenar o agravar la enfermedad:
- Estrés: Puede aumentar la inflamación y provocar brotes.
- Lesiones en la piel: Cortes, quemaduras o rascado excesivo pueden generar nuevas lesiones.
- Infecciones: Especialmente las de garganta, como la faringitis estreptocócica.
- Medicamentos: Algunos fármacos, como los betabloqueantes, pueden empeorar los síntomas.
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¿Cuándo acudir al médico?
Si notas lesiones persistentes en la piel, cambios en las uñas o dolor articular, es recomendable consultar con un especialista.
“El diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado pueden ayudar a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente”, señala la Dra. González.
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La psoriasis es una enfermedad que requiere manejo a largo plazo. Existen diversos tratamientos, desde cremas y fototerapia hasta medicamentos inmunomoduladores, según la gravedad del caso.
“Hoy en día, hay muchas opciones terapéuticas para controlar la enfermedad y evitar complicaciones. Lo importante es no automedicarse y acudir a un dermatólogo para un diagnóstico preciso”, concluye la especialista.