La enfermedad de Crohn provoca la inflamación en todo el tracto digestivo. No obstante, la colitis ulcerosa solo impacta el intestino grueso con la formación de úlceras en el revestimiento interno del colon. 

Los pacientes con enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa pueden experimentar dolor o cólicos en el abdomen, diarreas, fatiga, poco apetito, pérdida de peso y sangre en las heces. 

La causa exacta de las enfermedades inflamatorias del intestino son desconocidas. Sin embargo, se han relacionado la genética y los problemas con el sistema inmunitario con el desarrollo de estas enfermedades.

• Seguir el régimen de medicación para las EII
• Realizarse pruebas de detección y vacunas recomendadas a tiempo
• Dejar de fumar
• Realizar actividad física moderada 
• Limitar o dejar de beber alcohol
• Dormir lo suficiente
• Reducir el estrés