De cara al Día Mundial de la enfermedad de Parkinson te contaremos las diferentes etapas que deben atravesar los pacientes que son diagnosticados con esta enfermedad neurodegenerativa. Recordemos que, según MayoClinic, el párkinson es una patología progresiva del sistema nervioso que afecta el movimiento.
Además, de acuerdo a dicho portal médico, la sintomatología de este trastorno pueden evidenciarse de manera gradual. Inicialmente, puede que los pacientes sientan temblor perceptible en una sola mano. Sin embargo, se pueden presentar síntomas de la siguiente manera:
Etapa uno
La primera etapa del párkinson podría causar una sintomatología leve que generalmente no interfiere con las actividades diarias.
El paciente podría desarrollar temblor y otros síntomas de movimiento que podrían presentarse en una sola parte del cuerpo: cambios en la postura, la marcha y las expresiones faciales.
Etapa dos
En este estadio, la sintomatología comienza a empeorar y quien padece la enfermedad podría experimentar temblores, rigidez y otros síntomas del movimiento que comenzarán a interferir en la movilidad de ambas partes del cuerpo.
El paciente de párkinson comenzará a presentar dificultades para caminar, empezará a desarrollar una mala postura y, si vive solo/a, las actividades del diario vivir se podría complicar gradualmente
Etapa tres
Este estadio se concibe como una etapa intermedia en la que los pacientes comienzan a perder el equilibrio y podrían presentar lentitud en la realización de diversos movimientos.
Además, es común que quien padece dicho trastorno y se enfrenta a este estadío, sufra caída con mayor frecuencia y la sintomatología afecte actividades como vestirse y comer.
Etapa cuatro
Cuando se evidencia esta etapa, es cuando los síntomas comienzan a ser más graves y limitantes. Por lo general, los pacientes necesitan andadores y necesitará ayuda constante para realizar actividades del día a día. Además, no podrá vivir solo/a.
Etapa cinco
Dicho estadio es el más difícil. En ese punto las extremidades inferiores estarán rígidas y se dificultará caminar, pararse y es probable que quien padezca la condición, necesite ayuda permanente para moverse con autonomía.
