¿Afectación en el cerebro por insulina puede provocar alzhéimer?
En el marco de la semana del cerebro, el Dr. Heriberto Acosta Vélez, neurólogo1, asesor científico de la Asociación de Alzheimer de Puerto Rico y director de la Academia de Artes y Ciencias de Puerto Rico, durante su intervención en la conferencia virtual del Programa de Neurociencias Integradas y Aplicadas del Departamento de Ciencias Biomédicas Colegio de Ciencias PUCPR-Ponce abordó su exposición desde el recorrido fisiopatológico a través del alzheimer.
De acuerdo a su explicación, la enfermedad de Alzheimer es considerada como una enfermedad metabólica del cerebro, caracterizada por la resistencia a la insulina y al IGF, similar a la diabetes mellitus tipo 2.
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De acuerdo a Alzheimer´s Association, alrededor de 7 millones de estadounidenses viven con alzhéimer y para el año 2025, la proyección de esta cifra tendrá un aumento a casi 13 millones de personas.
¿Cuál es la función de la insulina y el IGF en el cerebro?
La insulina y el factor de crecimiento similar a la insulina (IGF) tienen funciones en el cerebro relacionadas con el control de la energía y el crecimiento.
La insulina: permite que la glucosa entre a las células del cuerpo para darles energía, modula el ciclo apetito-saciedad, libera neurotransmisores, contribuye a la supervivencia neuronal y plasticidad sináptica, regula la distribución de nutrientes y contribuye a la homeostasis energética y glucídica.
El IGF: regula los efectos de la hormona del crecimiento en el cuerpo, promueve el crecimiento normal de los huesos y tejidos, se produce en el hígado y músculos.
Además, la resistencia a la insulina cerebral puede causar disfunción cognitiva, alteración del estado de ánimo, neuropatología y neurodegeneración. El eje de insulina/IGF juega un papel fundamental en el envejecimiento.
“En el cerebro se ha visto como se ha desarrollado una resistencia a la insulina, allí se presentan cambios en la producción de amiloide y se puede provocar una destrucción de los microtubillos que van a la neurona”, añadió Acosta.
La acumulación de amiloide en el cerebro es una afección que puede causar demencia y accidentes cerebrovasculares. Se le conoce como angiopatía cerebral (AAC).
Resistencia a la insulina y consecuencias patológicas
Existen tres principales efectos de la resistencia a la insulina:
1- Contribuye al desarrollo de enfermedades sistémicas como la diabetes y la obesidad, la enfermedad de Alzheimer (EA) comparte características con otras enfermedades metabólicas y la progresión de la EA debido a la resistencia de la insulina/IGF en el cerebro.
2- Como consecuencias se presentan: hiperfosforilación de tau y formación de ovillos neurofibrilares, acumulación de placas de amiloide beta (AB), estrés oxidativo, neuroinflamación y disfunción mitocondrial.
El Dr. Heriberto Acosta Vélez comentó que, “la verdadera prevención de esta enfermedad debe ser antes de que comience, debemos identificar las personas que pueden ser propensas y los síntomas que muchas veces se pasan por alto”.
¿Qué son los biomarcadores?
En el contexto de la enfermedad de Alzheimer, los biomarcadores reflejan la presencia o progresión de la enfermedad, como las placas beta-amiloide, proteína tau y marcadores de neurodegeneración. Ahora bien, los biomarcadores sí pueden predecir la enfermedad, especialmente cuando se utilizan en combinación. Detectan cambios en las placas de beta-amiloide, enredos de tau y neurodegeneración años antes de los síntomas.
Los biomarcadores se prueban de la siguiente forma:
- Análisis de líquido cefalorraquídeo(LCR)
- Análisis de sangre
- Imágenes cerebrales (PET, MRI)
- Pruebas genéticas
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1- Dr. Heriberto Acosta Vélez, neurólogo, asesor científico de la Asociación de Alzheimer de Puerto Rico y director de la Academia de Artes y Ciencias de Puerto Rico