Tipos de pruebas para detectar el VIH
Una prueba de VIH es indispensable para determinar si una persona se ha infectado o no con VIH (virus de inmunodeficiencia humana).
El VIH es un virus que puede llegar a destruir las células del sistema inmunitario encargadas de proteger al cuerpo contra gérmenes que causan enfermedades.
Tipo de pruebas para VIH
- Prueba de anticuerpos: Por medio de una muestra de sangre o de saliva esta prueba permite detectar anticuerpos contra el VIH. Este tipo de prueba de anticuerpos contra el VIH es un método para determinar si la persona tiene VIH de 3 a 12 semanas después de la infección, comprendiendo que la aparición de los anticuerpos puede tardar este tiempo.
Aunque muchas de estas pruebas suelen realizarse tras una consulta médica por algún tipo de sintomatología, o luego de un control de rutina, existen Kits de pruebas de VIH para practicar en el hogar.
- Prueba de anticuerpos y antígenos contra el VIH: Este tipo de prueba intenta detectar la presencia de anticuerpos y antígenos contra el VIH en la sangre.
Un antígeno es una parte del virus que desencadena una respuesta inmunitaria, por lo que, en el caso de la persona que está expuesta al virus del VIH, en su sangre se pueden registrar la presencia de este tipo de antígenos.
Esta prueba permite una detección del VIH un poco más rápida que la prueba de anticuerpos y lo hace en un rango de 2 a 6 semanas después de la infección. Además, este es el tipo de prueba más común para detectar el diagnóstico de VIH.
- Carga viral del VIH: esta prueba detecta el nivel de VIH que hay en la sangre con el fin de detectar el VIH de forma más rápida que los dos tipos de pruebas mencionados anteriormente, sin embargo, es un procedimiento más costoso.
¿Por qué es importante realizarse una prueba de VIH?
Cuando el VIH es detectado de forma temprana, la persona tiene la posibilidad de tratar el virus con medicamentos para proteger su sistema inmunitario y prevenir llegar a desarrollar sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida).
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), recomiendan a toda persona entre los 13 y 64 años realizarse al menos una vez en la vida una prueba de VIH como prevención en sus controles médicos.
Ese tipo de virus se transmite principalmente por contacto sexual a través de la sangre, por eso, existen personas que están en un riesgo más alto de infección. En el caso particular de considerarse en riesgo, debería solicitarse con mayor rigurosidad este tipo de prueba con el médico primario.
Algunos de estos casos son:
- Hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres
- Tras tener una relación sexual con una persona infectada por el VIH
- Aquellas personas que a lo largo de su vida han tenido diferentes parejas sexuales
- Todo aquel que ha compartido agujas de drogas con otras personas o se ha realizado tatuajes sin las prácticas de higiene necesarias
La prueba de VIH se realiza entre dos o tres veces durante el periodo de gestación debido a que la madre puede transmitir el virus a su hijo durante el parto o a través de la leche materna.
En este último caso, consulte con su médico sobre la posibilidad de recetar algún medicamento que no afecte el desarrollo de su embarazo y que reduzca el riesgo de transmitir la enfermedad a su bebé.
¿Qué ocurre con la prueba de sangre?
Si la prueba es realizada por el médico o profesional de la salud, usualmente se toma una muestra de sangre de la vena de un brazo y se extrae una pequeña cantidad de sangre que se coloca en un tubo de ensayo y va al laboratorio.
En el caso de practicarla en el hogar, puede necesitar una muestra de saliva o una gota de sangre tomada de la yema de un dedo.
Para quienes lo realizan en su hogar, el kit de prueba tiene instrucciones precisas sobre cómo obtener empaquetar y enviar las muestras a un laboratorio para su análisis.
El dispositivo para la prueba de sangre que se toma de la yema de los dedos, muestra los resultados en pocos minutos y se considera muy eficaz.
Preparación para la prueba
La prueba para la detección de VIH no requiere ninguna preparación especial.
Recuerde consultar con su médico en caso de considerarse una persona en alto riesgo ya que en muchos controles médicos se pasa por alto este tipo de pruebas.
Puede que sienta un poco de dolor mientras le toman la muestra de sangre pero los síntomas desaparecerán rápidamente.
¿Qué significan los resultados?
Aunque un resultado negativo podría indicar que las personas no tienen la infección por VIH, también puede significar que tiene el VIH pero es muy pronto para detectarlo, recuerde que existen algunas semanas para que el virus pueda ser detectado de acuerdo al tipo de prueba que se realice.
Por el contrario, si el resultado es positivo puede que su médico solicite otro tipo de pruebas para confirmar el diagnóstico. Al hacerlo, se solicitará un seguimiento y se acordará con el paciente el tipo de tratamiento indicado de acuerdo a sus condiciones de salud.
Aunque el VIH no tiene cura, si es posible controlar completamente la infección gracias a los medicamentos que se conocen como terapia antirretroviral (TAR).
El TAR es un tipo de terapia que puede llegar a reducir considerablemente la cantidad del virus en la sangre impidiendo que la enfermedad avance y pueda llegar a convertirse en sida.
Con información MedlinePlus